Descripción


Presentación de la revista digital de la Universidad de Mayores

Esta es la versión digital de la revista Aula Magna, una publicación que aprovecha las virtudes de las nuevas tecnologías –la inmediatez, el aumento de la capacidad, la continua renovación de contenidos… las posibilidades, en suma, de un formato no sujeto a las limitaciones del papel--, pero mantiene el mismo espíritu que ha animado a la revista Aula Magna desde sus inicios, hace una década: servir de vehículo de informaciones, de conocimientos, de contraste de pareceres, de la Universidad de Mayores de Extremadura (UMEX).

La versión digital de Aula Magna es una especie de plaza pública en la que será visible lo que merezca celebrarse o discutirse, lo que merezca conocerse más allá del aula, lo que importe a los integrantes de la UMEX tanto en su condición de estudiantes y como de ciudadanos, porque Aula Magna pretende reflejar la realidad de la UMEX, desde conferencias a lecciones magistrales; desde acontecimientos culturales, divulgativos o de ocio a crónicas de viajes de estudios, y de acoger cuantos asuntos sean de interés para los alumnos.

Cada persona matriculada en la Universidad de Mayores está llamada a participar en la elaboración de la revista digital. Todo el mundo puede aportar su experiencia, sus conocimientos y también sus críticas para difundir, con la mayor riqueza de contenidos posible, la realidad de la UMEX.

Los interesados en aportar ideas, elaborar contenidos, reflejar experiencias, pueden contactar con:

Antonio Tinoco: atinocoardila@gmail.com
Antonio Medina: casacastillo1@telefonica.net
Antonia Marcelo: a.marcelo.garcia@hotmail.es
José Manuel Cordero Paniagua: jomacorpa@hotmail.com
Ramón Brito: rabrigo@hotmail.com
Andrés Sánchez Maján: asmajan51@gmail.com
Antonio Rodríguez Muñoz: rodmunnio@hotmail.com
Antonia Gómez Serrano: pilargs57@gmail.com

miércoles, 19 de febrero de 2014

EL TORNO HOMENAJEA A DULCE CHACÓN




I ENCUENTRO LITERARIO EN EL VALLE DEL JERTE

El Torno homenajea a Dulce Chacón
Por iniciativa de la AMPA del colegio de esta localidad del Jerte, las Letras extremeñas dedican tres días a homenajear a la escritora fallecida en 2003


                                  Inma Chacón firma su libro "Mientras pueda pensarte" a la poeta Antonia Cerrato Martín-Romo


Por Antonia Marcelo*

Entre el 14 y el 16 de febrero, se ha celebrado en El Torno, localidad del Valle del Jerte, un encuentro literario organizado por la Casa de Cultura "Dulce Chacón”, en colaboración con el AMPA, el Ayuntamiento, casas rurales  y el Plan de Fomento de la Lectura en Extremadura.

                                                    La autora de "Típiri-Típiri, el duende sastre" Rosa Lencero, con los representantes de su obra.
Han sido tres días de apretado programa, en los que la Casa de Cultura de El Torno se ha llenado de letras extremeñas, se han escuchado poemas de escritores consagrados como Inma Chacón, Rosa Mª Lencero, José Cercas, Isabel Blanco Ollero, Javier Feijoo y Antonia Cerrato Martín-Romo, apadrinando a escritores noveles, presentado libros, comentarios de cuentos con los niños del pueblo, proyección de cortos, dramatizaciones y una Feria del Libro Extremeño presente durante todas las intervenciones.

                                                    El poeta José Cercas apadrina a Demetrio Alonso e Ibai Pascual lo es por por Isabel Blanco Ollero 
                               
Tras la inauguración del encuentro, la novelista y poeta, directora de la Editora Regional de Extremadura y coordinadora del Plan de Fomento a la Lectura en Extremadura, Rosa Mª Lencero, dio paso a la escritora de Santa Amalia Antonia Cerrato Martín-Romo, que presentó el libro “Artistas con Haití”, una Antología Solidaria editada por la Asociación MIGAS (Miscelanea Integrada Grupos Artísticos y Sociales), en la que han intervenido noventa y cinco poetas de España, Francia y Chile, cuyos beneficios son entregados a Cáritas Internacional para la amortiguación de las consecuencias del terremoto en 2010.


                                
     
                                    José Félix Sánchez-Satrústegui, la Presidenta de MIGAS, Antonia Cerrato Martín- Romo y Caridad Jimenez Parralejo, presentan " la antología solidaria "Artistas con Haití"  

El profesor de la Uex Antonio Viudas Camarasa dictó una conferencia sobre las hablas del norte de Extremadura en las que se recordó a los más representativos poetas de ellas, como Gabriel y Galán y Luis Chamizo.



                                                  El organizador del encuentro Pablo Muñoz Regadera con el profesor Antonio Viudas Camarasa
                                                     
Inma Chacón, Rosa Mª Lencero, José Cercas e Isabel Blanco Ollero apadrinaron a escritores y rebosaron de felicidad al presentarlos. Nuevos escritores que llenarán de aventura los libros con ilusiones y fantasías, que han visto colmada sus aspiraciones de sacarlos a la luz a la vez que ser reconocidos por autores ya consagrados. El novelista David Matías presentó “Principio de Incertidumbre”, José Mª Castón “ El Agua de las Vegas Bajas”, el joven poeta Ibai Pascual Martín “Sonetos de Adolescencia”, y Demetrio Alonso Izquierdo “Sensaciones”.




   Los poetas  José Carlos Risco Chamizo y Javier Feijoo interpretando "Verbo Extremeño"
                        

Los asistentes a este encuentro también tuvieron la oportunidad de disfrutar de una Ruta Literaria Homenaje a Dulce Chacón al paraje de Las Vaquerizas, morada de cabreros y vaqueros, con el espectacular paisaje de montaña jerteño, cascadas y ascenso por la Garganta de la Puria, guiados por Manolo Robles Blanco, un simpático torniego que no economizaba tiempo ni palabras para disfrutar del paisaje, de la vegetación, las viviendas agrícolas autóctonas de estas escarpadas montañas, sus chozas y caseríos.

El guía local Manolo Robles Blanco ayuda a los senderistas a cruzar la Garganta Puria


Una vez llegados a la cima, finalizó el encuentro con un homenaje literario por parte de Inma Chacón y poetas asistentes que, ante el Castaño Libertad, sembrado por los torniegos en recuerdo de la poeta, donde descansan las cenizas de Dulce Chacón fallecida en 2003, fue testigo de emocionados poemas tanto de amigos como familiares presentes.


El grupo llegado de Badajoz, posa en el paraje Las Vaquerizas ante el "Castaño Libertad" que homenajea a Dulce Chacón


Antonia Marcelo Garcia 



*Alumna de 5ºUMEX
Enlaces

http://www.mayoresaumex.123miweb.es
http://www.amarcelo.es
http://www.ampaeltorno.blogspot.com.es/p/club-de-lectura.HTML
http://www.ampaeltorno.blogspot.com.es
http://www.aytoeltorno.es
http://www.alberjerte.com
http://www.turnat.com
http://www.elpadrelacalle.com
http://www.garzareal.com
http://www.editoraregextremadura.gobex.es
http://www.lecturaextremadura.gobex.es




PERSONAJES POLÉMICOS DE LA HISTORIA: CRISTÓBAL COLÓN (1ª parte)


Tribuna de opinión

Personajes polémicos de la historia

Cristóbal Colón



Por Antonio Rodríguez Muñoz


A muchos aficionados a los  temas históricos no les habrá pasado por alto el enigma de la vida de Cristóbal Colón y sus andanzas en el periodo de su vida anterior a la llegada a la corte de los Reyes Católicos para ofrecerles su idea de llegar a la India por Occidente sin invadir los dominios de Portugal, es decir, obviando la ruta del Sur de África despejada por Bartolomé Díaz y que propició el primer viaje a la India de Vasco de Gama.

 No es conveniente volver a caer a estas alturas en el debate tan trillado de un Colón español; mejor soslayar esta  hipótesis, por más que el aspecto de toda la existencia de nuestro personaje que dio lugar a las más encendidas controversias en los siglos XIX y XX, fuera su lugar de procedencia. Fue esta incertidumbre, el motivo de la presunción de un Colón gallego, extremeño, catalán o portugués. Pero está de sobras demostrado que el Cristóbal Colón que descubrió América, es el mismo Cristoforo Colombo nacido en la ciudad de Génova en 1551 (se desconoce el mes y el día), hijo de Domenico Colombo maestro lanero establecido en la entonces comercial y próspera ciudad-estado.

También se le supone de ascendencia judeoespañola, una conjetura sin valor por la falta de vestigios en sus escritos de esta variante del español al comparar sus documentos con textos judeoespañoles de aquella época. Hay otras hipótesis por las que algunos autores suponen a los antecesores de Colón expatriados judíos de España cuando en 1391 se produjo la explosión de odio, persecución y muerte en  todas las aljamas contra los hijos de Israel. Pero no es más que otra hipótesis sin fundamento que la sustente, según D. Ramón Menéndez Pidal, gran estudioso del genovés.

Abundan los aspectos incógnitos en la vida del navegante que suscitan  preguntas, tales como el hecho de que a pesar de no ser español ni haber estado en España antes de su venida para ofrecer su proyecto a la Corona de Castilla, usara el idioma español en sus escritos. También  resulta inquietante que siendo de Génova apenas se le conozcan documentos redactados en italiano. Así como también que, habiendo residido durante nueve años en Portugal donde se casó con una portuguesa y donde adquirió todos sus conocimientos sobre navegación, no utilizara la lengua lusa en sus papeles, aunque por razones obvias, es de suponer que sí la hablara.

Es la etapa de su vida entre 1476 y 1485 la más sugestiva. Se establece en Portugal trabajando para unos armadores genoveses y navega entre la metrópoli y las Islas Madeira. En 1480 se casa con Felipa Moniz, pasando a residir con su mujer a la isla de Porto Santo (Madeira) integrándose plenamente en la sociedad portuguesa. Entre 1482 y 1483 viaja a Guinea con navegantes portugueses; viajes auspiciados por el rey Juan II de Portugal. Al lado de los expertos lusos, Colón se impregna como una esponja de todos los avanzados conocimientos sobre navegación de los que disponían aquellos extraordinarios marinos, con diferencia, los mejores del Viejo Mundo. De ellos aprendió a tomar la altura del Sol con el astrolabio y toda la experiencia sobre navegación que tanto le sirviera después para su gran aventura del descubrimiento que lo haría inmortal. En 1484 presenta a Juan II sus propuestas de nuevos descubrimientos y el rey portugués las rechaza. A finales de ese mismo año, Colón se traslada a España, y en Córdoba lo encontramos esperando a los Reyes Católicos, que llegan a la ciudad andaluza en mayo de 1486.


Colón en Portugal


En este ciclo portugués, tuvo lugar la metamorfosis del tratante en lanas y azúcar genovés que entró en aquella crisálida como humilde comerciante para salir de ella transformado en  experimentado marino. En la escuela náutica portuguesa aprendió todo el saber que necesitó en su profesión de mareante. Pero he aquí otra de las grandes incógnitas de su vida: en ese periodo no se le conoce ningún escrito en portugués. La lengua que usaba  para todas sus anotaciones era el español. No se le conoce ni un solo documento escrito en la lengua de Camoes.  Hay varias teorías que pretenden explicar el enigma. Una de ellas es el hecho de que siendo Colón en los comienzos de su llegada a Portugal mercader, y teniendo las miras puestas en especializarse como comerciante de las firmas genovesas en los puertos españoles, lo moviera a aprender esta lengua. O esta otra que, dada la importancia del idioma de Castilla en aquellos tiempos y siguiendo la moda de muchos portugueses de adoptar el  español como lengua de cultura, optara por ella como herramienta de trabajo o para estar en sintonía con la tendencia a usar el castellano por lo más selecto de la sociedad portuguesa de entonces. Sea como fuere, lo cierto es que no deja de sorprendernos semejante mimetismo idiomático, viviendo entre portugueses.

Hasta que Colón llega a Portugal son numerosas las circunstancias opacas de su vida que nos llenan de escepticismo y no dejan otro recurso que la especulación y la hipótesis. Así por ejemplo; él afirma haber estudiado en la Universidad de Pavía. También necesita inventar para adquirir prestigio ciertas hazañas marítimas que nunca realizó: haber navegado hasta la mítica  Isla de Tule o haber tenido contactos con Paolo de Toscanelli. Es difícil poder afirmar nada de todo este infundio del que Colón se sirvió ante los Reyes Católicos para darse importancia. Antes de establecerse en Portugal, toda la experiencia que había adquirido como marinero fue la del cabotaje. Colón para merecer dignamente su cargo de Almirante de la Mar Oceana, tuvo que simular ante Isabel y Fernando un pasado y una formación en gran parte falsos.

En lo que respecta al idioma italiano, Colón no lo utiliza; a pesar de los abundantes documentos y relaciones que dejó. Con sus paisanos de Italia se comunica siempre en español, tanto en notas íntimas a los amigos como en documentos de índole comercial; o en sus anotaciones sobre viajes. ¿Pudo Colón haberse olvidado de su idioma materno en el tiempo que vivió en Portugal? Es difícil de creer que, habiendo abandonado Génova a los 25 años cuando ya todos los puntos de referencia fundamentales de la personalidad se han adquirido, se olvidara de su idioma. Es imposible explicarlo. No es por tanto de extrañar que muchos investigadores hayan puesto en tela de juicio, motivado por estos hechos, la procedencia  italiana de Colon.

Hay otro acontecimiento ocurrido al joven Cristoforo Colombo, según cuenta el Padre Las Casas, que sugiere el modo por el cual recaló el futuro almirante en Lisboa: se encontraba a bordo de una nave genovesa que transportaba almáciga desde la Isla de Quíos a Lisboa para después vender el cargamento en Inglaterra y Flandes. Según cuenta el dominico, la nave de Colón fue atacada por una flota de corsarios franceses frente al cabo de San Vicente. El barco de Colón se incendió, salvando él la vida nadando las seis millas que lo separaban de la costa. Después, caminó hasta Lisboa donde la colonia de comerciantes genoveses lo acogió amablemente. Acerca de este  incidente se ha llegado a especular con la posibilidad de haber sido Colón un miembro del bando pirata que cayó al mar por accidente durante la refriega del asalto. Esto explicaría muy bien el interés que siempre mostró el genovés por borrar su pasado. 

El secreto de Colón

El proyecto de Colón para llegar a las Indias, (entonces se entendía por Indias a todo el continente asiático) implica que era de los que creían en la redondez de la tierra. Esto no tiene por qué parecer una simpleza, ya que, aunque la circularidad del mundo se sabía desde la Antigüedad Clásica, la Iglesia durante la Edad Media combatió contundentemente a los pensadores que se atrevían a discrepar de un mundo plano con la ciudad santa de Jerusalén como centro en armonía con la Biblia; y así, la revelación de una Tierra redonda que proclamaran los sabios griegos, había caído en el olvido. El miedo ancestral a un océano desconocido y tenebroso colmado de horribles monstruos tan propagado en la Edad Media fue la barrera que impidió la exploración más allá de lo hasta entonces seguro de alcanzar  con aquellas naves en pocos días de navegación.

Las más deseadas y preciadas mercancías que demandaban la nobleza y burguesía europea, provenían de Asia, las cuales se habían traficado desde Oriente a través de la Ruta de la Seda desde tiempos antiguos. Pero a mediados  del siglo XV  el comercio entre China  y Europa, tal y como se había venido desarrollando durante siglos,  fue gravemente vulnerado por la intervención  del Islam que lo reclamó exclusivamente para sí. Las casas comerciales italianas fueron las más perjudicadas. Además, cuando los turcos conquistaron Constantinopla, se encarecieron enormemente las mercancías. Venecia perdió las guerras que entabló contra los turcos y con ellas el comercio con el Oriente. Y a Génova, con el control del Bósforo en manos turcas, se le esfumó de golpe todo el comercio con los países del entorno del Mar Negro.

Todos estos quebrantos dieron comienzo a una preocupación generalizada del comercio europeo por encontrar otros caminos por los que poder llegar a Asia, por un lado; por el otro, el influjo de los relatos de Marco Polo con su “Libro de las Maravillas” encendió las cabezas de toda Europa poniendo las miras en China como paradigma de una tierra de riquezas ilimitadas; haciendo volar tanto la imaginación, que se pueden considerar estas  circunstancias la verdadera causa de la fiebre por los descubrimientos que invadió Europa con la Península Ibérica en primer grado por su favorable situación geográfica, cuando la necesidad de oro se volvió apremiante.


Fin del primer episodio

Continuará






  











jueves, 6 de febrero de 2014

TRIBUNA DE OPINIÓN: ¿QUÉ PASA CON EL CLIMA?

Tribuna de opinión




¿Qué pasa con el clima?




Por Antonio Rodríguez Muñoz*



¿Está afectando realmente el cambio climático a Extremadura? En lo que respecta a esta cuestión y en lo que nos alcanza la memoria, parece que no hemos percibido todavía un cambio a nivel de la gente de la calle. Por más que oigamos decir  que ahora llueve menos, lo cierto es que el índice pluviométrico de nuestra región no se ha modificado y lo único apreciable (por lo que pudiéramos  suponer que ahora cae menos lluvia) es la ausencia, casi total, de aquellas terribles crecidas del Guadiana, domado y sujeto a un caudal menos pernicioso desde los años cincuenta por medio de las presas a lo largo de su cauce.
Otra referencia aparente de aquel tiempo es que los ciclos invernales de entonces se nos antojan más largos, y no lo eran. Cabe recordar tres invernadas recientes, largas y lluviosas -las de 2010, 2011 y el pasado 2013- en las que hubo borrascas casi semanales de octubre a mayo, con algunos daños para la agricultura.

En cuanto al calor, la estadística refleja que el aumento ha venido siendo en términos globales de 0,3 grados por década, y el cómputo  para los últimos sesenta años de 1,8 grados para nuestra región en el supuesto de una uniformidad en el incremento gradual de la temperatura por todo el planeta. A nosotros, no obstante, nos siguen pareciendo los veranos igual de calurosos que entonces, con la diferencia de que en estos días nos es más soportable el calor por el uso casi generalizado de los acondicionadores de aire. 
De todos modos no podemos obviar el hecho irrefutable del cambio climático. Tenemos que creer forzosamente en la estadística y no podemos pasar por alto sus resultados. Pero sea porque el aumento de la temperatura no es rigurosamente progresivo sino más bien fluctuante (con altos y bajos), y estamos teniendo veranos normales que alternan con otros menos calurosos; o porque asociamos el fenómeno con los ambientes de otras latitudes con climas más extremos, el hecho es que no nos preocupa mucho que digamos todo esto, y a veces nos parecen innecesariamente alarmistas algunos científicos que de vez en cuando vienen a asustarnos con sus datos por la televisión.

En lo único patente que la gente corriente notamos que un cierto cambio está teniendo lugar, es la súbita desaparición de algunos insectos,  anfibios y reptiles de nuestros campos. Por ejemplo, en la ausencia casi total de saltamontes. Todos recordamos la abundancia de estos insectos en nuestra infancia, cuando al paso por cualquier campo se levantaban por delante de nosotros cantidades ingentes de “langostos” y ahora es notoriamente difícil ver alguno. La consecuencia lógica de esta mengua es la falta de lagartos de nuestras tierras que tienen en estos bichitos la base de su sustento. Otra escasez notable son las ranas, que podemos con toda seguridad atribuir también a la falta de insectos de los que estos batracios se nutren, así como también en cierta medida a  la impureza de la atmósfera, que afecta de forma seria a su organismo al ser absorbida a través de su compleja y sensible piel.

Evidentemente, la atmósfera ya no es la misma; tenemos, además de lo que generamos nosotros, lo que nos viene de fuera: las emisiones de miles de chimeneas en las otras regiones industrializadas que el viento se encarga de diluir por toda ella. Estas emisiones contaminantes están constituidas principalmente por dióxido de carbono, óxidos de nitrógeno y anhídrido sulfuroso. Aparte de lo anteriormente expuesto, esta complicación irá en aumento favorecida por nuestros propios malos hábitos refractarios a todo cambio, por más que la televisión sea un magnífico medio para la divulgación de ideas nuevas. Cada vez que ponemos en marcha algunos de nuestros aparatos domésticos -a veces innecesariamente o por periodos de tiempo demasiado largos-, aumentamos la quema de carbón, ya sea en forma de carbón mineral o hidrocarburos, (combustibles fósiles), por lo tanto liberando más monóxido de carbono.

El planeta tiene una relativamente gruesa capa atmosférica que existe como parte de un delicado balance natural. Las radiaciones del Sol pasan a través de ella. Una parte es absorbida por la Tierra, calentándola, y otra rebota hacia la capa atmosférica. La atmósfera es suficientemente gruesa como para mantener atrapada parte de esta radiación rebotada del suelo entre ella y la Tierra, mientras que otra parte de esta radiación escapa de vuelta al espacio. La correcta cuantía de radiación atrapada es beneficiosa porque aporta calor, el cual asegura que la Tierra no se vuelva demasiado fría.

El problema consiste en que esta capa de la atmósfera aumentada por las emisiones que se lanzan desde las zonas industriales del globo: las ciudades, decenas de miles de aviones surcando el espacio y el escape de los automóviles. La atmósfera está reteniendo por esta causa más radiaciones, por tanto haciendo que se caliente el planeta y fundiendo el hielo de los polos y glaciares. Esto es una simple explicación del proceso conocido como calentamiento global.

Trastorno del equilibrio natural por el empleo de productos
químicos y otros contaminantes


Podemos colegir que la causa directa de todo este fenómeno de la desaparición de insectos de los campos extremeños, en gran medida está impulsada también por  el empleo de pesticidas en las zonas de regadíos; unas 260.000 hectáreas en la provincia. Este área de cultivos -comparada con la totalidad de la superficie provincial  de 2.170.000 hectáreas- nos puede parecer de poca influencia para contaminar la superficie de la provincia,  pero no es así; bastaría mucho menos superficie de cultivos tratados con pesticidas para  romper el delicado equilibrio natural.

Tenemos además otro problema bastante común con otras partes del territorio nacional, pero sin compartir el beneficio de la industrialización que lo genera en esas otras regiones, como puede averiguarse con un simple vistazo al río Guadiana a su paso por Badajoz, y sorprende el poco cuidado que hemos prestado a este gran deterioro durante más de  sesenta años que ha causado en los peces y otras formas de vida acuática, así como a la propia salud del río. Sin lugar a dudas motivado por la falta de verdaderas depuradoras a lo largo de su cauce, desde el Valle de la Serena hasta la propia ciudad de Badajoz. Es por lo demás lógico que seamos los pacenses los que suframos el peor estropicio de nuestro querido río al llegarnos éste en las peores condiciones, tras recibir los vertidos de ciudades tan pobladas como Villanueva de la Serena, Don Benito, Mérida, y Montijo, con todos los vertidos procedentes de la industria del tomate en verano

La salubridad del río


En lo concerniente a la contaminación del río Guadiana,  no puede existir una razón que justifique su menoscabo, sobre todo teniendo en cuenta que somos una región predominantemente agrícola y ganadera con una exigua representación de industrias contaminantes. Debemos arreglar de una vez para siempre este asunto del río. En una visita a Mérida hace unos meses pudimos comprobar la extraordinaria labor de acondicionamiento de ambas orillas del Guadiana. Una obra encomiable, muy acorde con la ciudad patrimonio y un maravilloso logro para el disfrute de todos los emeritenses. Badajoz va por el mismo camino de lograr algo muy parecido para todos nosotros con el plan de mejoras de la margen derecha del río y es de esperar que muy pronto todos estemos disfrutando de los paseos por sus orillas ajardinadas, y Badajoz logre ser una ciudad todavía más bonita, con un incremento de las zonas por donde pasear y sentirse a gusto.

Es de suponer que exista un plan paralelo a estas mejoras de las orillas del río para que volvamos a disfrutar de las aguas incontaminadas que nosotros conocimos en la niñez. De otro modo tendría muy poco sentido lógico y práctico el dispendio y el esfuerzo de acondicionar con paseos arbolados y jardines sus dos orillas si después tenemos que pasear por ellas percibiendo la insoportable visión de sus sucias aguas y su pestilente hedor en verano.

*Antonio Rodríguez Muñoz es alumno de 4º curso de la UMEX